Cuando llegan los últimos meses es cada vez más difícil encontrar una posición de descanso que sea lo suficientemente adecuada. Estos pueden hacer tu cojín más blando, rígido, adecuarse a la altura necesaria para amamantar con facilidad o para darte más soporte en la espalda. Al accionarlo te permitirá unir los dos extremos y emplear el cojín como uno antivuelco para tener al bebé en brazos mientras estás sentado y así la presión de brazos, hombros y espalda se eliminará.
La mejor oferta de cual es el mejor cojin de lactancia
Mide 190 cm en total, lo que lo convierte en el cojín más amplio que puedes encontrar online, con un peso mínimo de tan solo 1,2 kg. Con una longitud de entre 40 y 45 centímetros, una altura de entre 20 y 25 centímetros y una anchura de 30 centímetros aproximadamente. Gracias a la forma de este cojín de lactancia las posiciones para darle de comer a tu bebé son mucho más cómodas. También debes tomar en cuenta que, los cojines más grandes pueden ser más útiles durante el embarazo. Son muy cómodos e higiénicos; sin embargo, puede ocasionar reacciones alérgicas y se deben lavar a mano. Por ello, hicimos una guía para aclarar todas las dudas que surjan al elegir un cojín de lactancia.
La mejor oferta en cual es el mejor cojin de lactancia
Si estas embarazada, un cojín de lactancia te puede ayudar a dar soporte a alguna parte de tu cuerpo que lo necesite; suele pasar que el embarazo no te permite relajar tu cuerpo por completo. Por ello, el cojín de lactancia será útil para pechos no muy grandes o pechos firmes con los pezones orientados al frente, y no tan útil para mujeres con pechos grandes o caídos con pezones orientados hacia abajo. El interior no es de bolitas… esa es la gran diferencia, así que tenlo en cuneta a la hora de elegir tu cojín. Incluyen reposacabezas en sus modelos que son muy útiles para la comodidad del bebé y los materiales que Jané utiliza siempre son de primera calidad. Aunque te lo recomiendo más en invierno que en verano porque la textura de su funda da un poco de calor. Es una buena postura para amamantar durante la noche o de día si la madre está cansada o no se siente bien.